1.- Borre periódicamente el historial de navegación y las cookies: borre con frecuencia su historial de navegación y las cookies para reducir los datos recopilados sobre sus actividades en línea.
2.- Revise la configuración de privacidad: verifique y ajuste la configuración de privacidad en las plataformas de redes sociales y otros servicios en línea para limitar la recopilación de datos.
3.- Utilice herramientas centradas en la privacidad: considere utilizar navegadores, motores de búsqueda y aplicaciones centrados en la privacidad que prioricen la protección de sus datos.
4.- Sea consciente de las actividades en línea: sea consciente de la información que comparte y de los sitios web que visita. Piense dos veces antes de compartir datos personales.
5.- Limpieza de datos: revise y elimine periódicamente correos electrónicos, archivos y contenido digital innecesarios para minimizar la huella digital que deja.
En la era digital es fundamental tener en cuenta nuestra huella digital o “polvo digital”. Si bien la comodidad y la conectividad que ofrece la tecnología son innegables, es fundamental comprender las implicaciones de los datos que generamos y tomar medidas para gestionar y proteger nuestras identidades digitales.
Al tomar medidas proactivas para minimizar y controlar nuestro polvo digital, podemos proteger mejor nuestra privacidad, seguridad y presencia en línea.
Fuente electrónica de la información:
Palabra del día
Ignoto: No conocido ni descubierto. (Fuente: DRAE).
La frase del día
"El que cobra caro atrae clientes que pagan más"