Al hablar de conexión, nos referimos a los delitos que, aunque sean distintos, están tan relacionados entre sí, que sus autores deben ser juzgados por un mismo tribunal.
Esto, puede ocurrir en varias circunstancias:
1.- Cuando exista la participación de varias personas. Por ejemplo, un grupo de personas que cometen un mismo delito en distintos lugares o momentos, pero tienen un plan en común.
2.- Delitos instrumentales: cuando un delito se comete para perpetrar otro; un ejemplo de esto puede ser el robo de un vehículo para cometer un secuestro. En este caso, el robo y el secuestro son delitos conexos.
3.- Delitos para procurar impunidad: esto ocurre cuando alguien comete un delito para encubrir otro.
4.- Cuando concurran varios delitos imputados a una misma persona.
5.- Cuando la prueba de un delito influya sobre la prueba de otro delito.
Ahora bien, para determinar qué tribunal tiene la competencia deben examinarse dos supuestos, a saber:
Primero. El tribunal del territorio donde se haya cometido el delito más grave.
Segundo. Si los delitos tienen igual pena, la competencia será del tribunal que deba conocer el delito que se cometió primero.
Fuente digital de la información:
La frase del día
"El objetivo del guerrero no es vencer todas las batallas, sino nunca ser derrotado"