Capítulo III
CONSEJOS PRÁCTICOS
La seguridad que tengas en ti mismo, dependerá de la
práctica y cuidado de tu arma; practica y límpiala cuando menos una vez por mes
en forma total, y a diario, por fuera con aceite.
En el barrilete del revólver es conveniente dejar la
recámara que queda directa al percutor VACÍA, por si llegara a golpearse el
martillo al caerse el arma.
A un niño NO le escondas un arma; enséñale lo que
hace (en un campo de tiro) y no la tocará.
Los campos de tiro tienen algunas reglas específicas,
RESPÉTALAS.
Hay dos clases de gentes PELIGROSAS, las que saben
manejar las armas y las que creen que ya saben.
Fuente. MANUAL DE ARMAS DE FUEGO PARA CUERPOS DE SEGURIDAD. LICENCIADO EN
CRIMINOLOGÍA EVERARDO OCHOA BERNAL. Estados Unidos de América (USA), Lexington,
KY. p.40.