La mencionado operación es considerada una de las intervenciones encubiertas más largas y costosas de la CIA, fue una operación de inteligencia y contrainteligencia contra los soviéticos que destinó más de 3.000 millones de dólares en armas para los muyahidines. Durante este periodo, se gestó una alianza con líderes radicales, incluyendo a Osama bin Laden, quien llegó a Afganistán en 1984 y estableció la base de lo que sería Al-Qaeda. Bin Laden -quien era saudí- compartía la visión de un califato islámico global y brindó apoyo logístico a los Talibanes. La relación entre Estados Unidos y los muyahidines se tornó hostil tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, lo que desencadenó la invasión norteamericana a Afganistán.
Fuente electrónica de la información:
La frase del día
"Sin riesgo no hay historia"
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Su comentario será respondido a la brevedad. ¡Gracias por comentar!